No tener cable implica ser libre, ser público y principalmente no colaborar con grupos multimediales monopólicos de actitudes capitalistas salvajes.
¿Qué vas a hacer con los $140.- que te sobren a fin de mes? No importa porque no se trata de dinero.
Leamos las declaraciones de un ex abonado al cable:
Cuando tenia cable me la pasaba horas vegetando y haciendo zapping , veía hasta 10 programas a la vez, sin realmente ver ninguno. Rara vez me veía alguna película que no conociera siempre termina viendo una que vi ya varias veces.
Después de hacer zapping sin parar terminaba viendo TELEFE y me sentía un gil por pagar tanto para después terminar diciendo "puta che en el cable no hay nada".
Y yo digo, ¿no hay nada? pero si hay como 80 canales ¿como no va a haber nada? La verdad es que la nada esta dentro nuestro y se refleja en la inconformidad producto de la excesiva oferta.
Ahora veo canal 8, canal 10 y la televisión pública y créanme: soy más feliz.
Hacete fan hoy de YO NO TENGO CABLE y mañana da de baja el cable, se puede ser feliz con menos televisión.